Fatiga Cronica y Fibromialgia

Fibromialgia (FM) y el Síndrome de fatiga crónica (SFC) son patologías cada vez más frecuentes. La medicina ha tardado mucho tiempo en definirlas y en diagnosticarlas, y hoy son consideradas enfermedades emergentes.
Las personas que las padecen han recorrido un gran número de especialistas y les han realizado múltiples pruebas diagnóstica sin obtener resultados claros. Son enfermedades crónicas que sin ser mortales, generan un elevado grado de discapacidad y de sufrimiento físico con la consecuente disminución de la calidad de vida. Las personas que padecen estos tipos de patologías, les cuesta mucho seguir las actividades cotidianas diarias y cuando padecen crisis les es imposible ducharse, salir a la calle y vivir contentos porque son procesos muy invalidantes.
Clasificadas como enfermedades emergentes,  la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala con el código M79 y G93-3 a la FM y al SFC, se trata de patologías que afectan fundamentalmente al sistema neurológico, en el caso de la FM y al sistema inmune y neurológico, en el caso SFC. En la Fibromialgia se produce un incremento de la sensibilidad al dolor, dolor local, muscular o fascial, tendinoso que se incrementa al tocar o incluso acariciar (alodinia).

Cada paciente tiene una forma de presentación individualizada de su enfermedad, cada uno tiene su "fibromialgia" o su "Fatiga crónica" y la medicina actual sigue sin encontrar una causa.

La Medicina Integrativa ofrece a estos pacientes una nueva forma de abordar su enfermedad, a través de un tratamiento integral que valora los aspectos globales del individuo.No debemos olvidar que la Fibromialgia y la Fatiga Crónica son enfermedades de diagnóstico de exclusión, es decir, para llegar a ellas antes hay que descartar otros procesos.

Hay un incremento de la sensibilidad frente a las sensaciones, como pueden ser los cambios de temperatura. Se acompaña de agotamiento y síntomas fluctuantes como alteraciones sueño, trastornos de afectividad, problemas cognitivos, rigidez muscular, frio extremidades, cefalea, intestino irritable, tiroiditis de Hashimoto, intolerancia a medicamentos, sustancias químicas, síndrome de mucosa seca (ojos-boca-vagina), dolor mandibular, problemas de concentración, memoria o mareos. Otros síntomas a nivel metabólico son hipoxia celular, disfunción mitocondrial y exceso de óxido nítrico. En 1843, Yunus define por primera vez esta patología y en el año 1990, el Colegio de Médicos Americano crea un diagnostico unificado del problema (criterios ARC 1990). Sucesivamente, Yunus habla del “Síndrome de sensibilización múltiple” para referirse al grupo de enfermedades emergentes asociadas a la fibromialgia. 

En 1992 se reconoce la enfermedad por la OMS como M79.9 dentro de las enfermedades reumatológicas, siendo la 3ª enfermedad más frecuente en este campo. Al Síndrome de Fatiga Crónica, identificado como G93.3 en el CIE-10, actualmente se le conoce con el término de SFC-EM o SFC con encefalitis mialgica. Este afecta al sistema inmunitario, al endocrino y al sistema nervioso central, presentando un cuadro multisistémico que llega a reducir la actividad de la persona afectada en un 80%, con una sensación de gripe constante, alteraciones del sueño, mialgias, malestar global y problemas cognitivos. Estas enfermedades suelen instaurarse de forma progresiva, comenzando con problemas locales: dolores lumbares, dorsales, dolor de una cadera... para ir incrementándose hasta hacerse generalizados y se acompañan de otros síntomas como cefaleas, problemas de concentración, sueño irregular y no reparador, adenopatías del cuello, malestar profundo post-esfuerzo. Los síntomas intestinales son una constante, con alteraciones del ritmo intestinal, estreñimiento o crisis diarreicas. Los estudios y exámenes de laboratorio tradicionales no ofrecen información de valor. En numerosas ocasiones reciben la opinión de "no tener nada" y se les orienta a ver a un psiquiatra bajo la idea de padecer de depresión. Es cierto que la presencia de ansiedad o alteraciones del estado de ánimo están presentes pero son síntomas que acompañan a la sensación de agotamiento y dificultad para vivir una vida normal.

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